La reflexión o moraleja de aquel día fue el reconocimiento de un abuso de una bebida innecesaria y despertar a la realidad energética que necesito para los fines de semana y el futuro que quiero construir.
Emocionalmente, sigo extrañando a aquella mujer que me ofreció un futuro de amor, pasión y felicidad que sólo duró unos meses y se ha repetido en contados momentos a lo largo de estos últimos 10 años.