jueves, 17 de febrero de 2011

Dejarse la barba

Desde los tiempos en el Banco, recuerdo 1995, cuando me dejé crecer la barba por primera vez. Fue para durante las vacaciones, y sólo me dejé bigote y pera (barba candado).

Con el tiempo he esperado la barba cerrada pero lo más cercano lo conseguí en el verano del 2008; momento cargado de muchas experiencias, que terminaron con mi salida del colegio y retorno a Zofri.

¿Qué relación tiene la barba con lo sucedido?
Quizás, el aura que proyectaba: cansancio, agotamiento, desilusión, confusión, desgracia, y qué cosas más, que hoy, vuelvo a entender que es el resultado de los excesos de bohemia.

Me he dejado la barba, una vez más, y tengo dudas.

Estoy pensando en técnicas de autocuidado.


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