sábado, 13 de agosto de 2011

Nadie es tan malo o tan bueno como pretende

En momentos como hoy, vuelven algunos recuerdos de Lalo (K), quien me abrió sus puertas hace exactamente 4 años atrás y despertó una historia de largo análisis.

Debo mantener mi silencio y cualquier comentario sólo lo puedo entregar en estas páginas.

Ella me ha hecho entender que yo vivo aquí pero no pertenezco aquí.

Ella es la dueña y yo un allegado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario